Calzado de seguridad

Tipos de calzado de seguridad: Guía para elegir el adecuado

Cuando trabajamos en entornos que implican riesgos, el calzado de seguridad es uno de los elementos más importantes para protegernos de posibles accidentes. Ya sea en construcción, industria, hostelería o logística, contar con el tipo de calzado adecuado puede marcar la diferencia en nuestra seguridad y comodidad. En esta guía, te explicaré los diferentes tipos de calzado de seguridad y cómo elegir el más adecuado para tus necesidades laborales.

¿Por qué es importante elegir el calzado de seguridad adecuado?

El calzado de seguridad está diseñado para proteger nuestros pies de riesgos específicos según el entorno laboral. Este tipo de calzado cuenta con refuerzos y características especiales que protegen contra caídas de objetos, superficies resbaladizas, perforaciones y otros peligros. Elegir el calzado correcto no solo minimiza el riesgo de accidentes, sino que también previene molestias y problemas de salud en los pies, piernas y espalda derivados de trabajar en condiciones incómodas.

Tipos de calzado de seguridad según el nivel de protección

Existen varios niveles de protección en el calzado de seguridad, que se eligen en función de los riesgos específicos del entorno laboral. Los niveles de protección están normalizados y cada tipo de calzado se clasifica de acuerdo a los materiales y características de seguridad que ofrece.

1. Calzado con puntera de seguridad

Este tipo de calzado es uno de los más comunes y está diseñado para proteger los dedos de los pies contra impactos. La puntera de seguridad suele estar fabricada en acero, aluminio o materiales compuestos, capaces de resistir caídas de objetos pesados. Este tipo de calzado es ideal para entornos de construcción, talleres y trabajos industriales donde existe el riesgo de impactos.

2. Calzado antiperforación

El calzado antiperforación cuenta con una plantilla especial en la suela que protege los pies de objetos punzantes en el suelo, como clavos o escombros. Esta característica es común en trabajos de construcción, almacenes y fábricas. La suela está fabricada con materiales resistentes, como acero o materiales compuestos, y evita que los objetos afilados atraviesen el calzado.

3. Calzado antideslizante

Para aquellos que trabajan en superficies resbaladizas, como en hostelería o fábricas donde se manipulan líquidos, el calzado antideslizante es esencial. Este tipo de calzado cuenta con una suela que mejora la tracción y reduce el riesgo de resbalones y caídas. Es ideal para entornos donde es común encontrar superficies húmedas o grasientas.

4. Calzado resistente al agua

El calzado resistente al agua está diseñado para entornos donde los pies pueden estar en contacto con agua o líquidos de forma constante. Este tipo de calzado es adecuado para trabajos en exteriores, en condiciones de lluvia, o para trabajadores que manipulan líquidos de manera continua, como el personal de limpieza.

Materiales y características adicionales a considerar

Además del tipo de protección, el material del calzado también influye en la durabilidad y comodidad. Algunos de los materiales más utilizados son:

  • Cuero: Resistente y duradero, ofrece una excelente protección en condiciones extremas.
  • Materiales sintéticos: Suelen ser más ligeros y permiten una mayor transpirabilidad, ideales para climas cálidos.
  • Suela de goma: Ofrece un buen agarre y es resistente al desgaste, especialmente útil en calzado antideslizante.

Plantillas y soporte para el arco

Es importante elegir un calzado de seguridad que incluya plantillas cómodas y soporte adecuado para el arco del pie. Esto ayuda a reducir la fatiga y el dolor, especialmente en trabajos que requieren largas horas de pie. Si el calzado no incluye plantillas adecuadas, siempre se pueden agregar de forma adicional para mejorar la comodidad.

Consejos para elegir el calzado de seguridad adecuado

Para seleccionar el calzado de seguridad correcto, debes considerar las necesidades específicas de tu entorno laboral. Aquí algunos consejos:

  • Identifica los riesgos del entorno: Evalúa los peligros específicos de tu trabajo para determinar el nivel de protección que necesitas.
  • Prueba el calzado antes de comprarlo: Asegúrate de que el calzado se ajuste bien y sea cómodo, ya que un mal ajuste puede provocar molestias o accidentes.
  • Opta por materiales transpirables: Si trabajas en un lugar caluroso, elige un calzado que permita la ventilación para evitar sudoración excesiva.

Inversión en salud y protección 

Elegir el calzado de seguridad adecuado es una inversión en salud y protección que no se debe tomar a la ligera. Dependiendo del entorno y los riesgos específicos, existen diferentes tipos de calzado que ofrecen características de seguridad y comodidad necesarias para cada caso. Tomarse el tiempo para seleccionar el calzado adecuado no solo mejora la seguridad laboral, sino que también contribuye al bienestar y rendimiento de cada trabajador.

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